miércoles, 9 de octubre de 2013

TEMA 3: PERCEPCIÓN, EXPRESIÓN Y COMUNICACIÓN.


Lo que se puede ver, o lo visible, es a veces confundido con la realidad. La realidad la podemos ver cuando somos capaces de percibirla, mientras que lo visible es solamente las imágenes que nuestro ojo proyecta al ver. Un ejemplo de lo visible es la televisión o las imágenes de una cámara fotográfica, pues estos instrumentos están reproduciendo imágenes, y las imágenes son la visión de una recreación sobre un momento que ha sido capturado, congelado y separado de su tiempo de origen. Cada imagen es un modo de ver  las cosas para cada uno.

El modo de mirar las obras, dependiendo de la situación y del medio de observación (tiempo, lugar, la propia experiencia...etc.), es decir la perspectiva que tenemos al mirar un cuadro o pintura, por ejemplo, podía llegar a situar al espectador como centro del mundo, o no llegar a sentir nada.

En el arte, como en todo, el sentido de la vista, llega antes a la persona que las palabras, pero el conocimiento no se adecua a la visión. Lo que sabemos o podamos creer interfiere en nuestro modo de mirar las cosas. Un ejemplo de ello es el último cuadro de Van Gogh, que adquiere mayor importancia o con una impresión diferente en tu conocimiento cuando sabes que fue el último que pintó antes de suicidarse.

Como se ha dicho anteriormente, la visión del arte es influenciada por el conocimiento de sus características, como puede ser el caso del arte marginal. Este arte es un arte un tanto especial por la peculiaridad de sus artistas, y es que son en su mayoría enfermos mentales o marginado pero con sensibilidad y producción artística.

Las obras del arte marginal son sobre todo de autores que no han necesitado una preparación, ni maestro. Son obras especiales porque no han sido influenciadas por la contaminación de los convenios de la sociedad o de la idea social de estética, sino que son obras originales y auténticas, una expresión de creatividad del interior siniestro de la mente. Artistas importantes como Adolf Wölflli u obras como la de Edward Much o Vincent Van Gogh.

Así la gran mayoría de las obras se clasifican en el Art brut, un término francés referente a Arte bruto, un arte grosero, salvaje, brutal, crudo y violento. Y con ello han adquirido una gran importancia.


Reflexionando sobre lo anterior hablado, nos damos cuenta de que el arte, cuando lo contemplamos, o somos conscientes de sus características, o de las situaciones que influyen en nuestra observación, puede expresarnos una gran cantidad de sensaciones que incluso a lo más siniestro o lo más raro, podamos sacarle un valor como puede ser su belleza, o incluso todo lo contrario. Además podemos darnos cuenta de la gran diversidad de personas que pueden plasmar el arte desde su punto de vista, que pueden llegar a ser obras tan importantes como las de profesionales, como es el caso del arte marginal.

No hay comentarios:

Publicar un comentario